¿Por qué son tan hermosos los niños especiales?
Todos los niños llenan de amor al mundo, de felicidad, de pureza, los niños especiales tienen el rostro más bello, los ojos más dulces, las miradas más hermosas, miradas más profundas y las miradas más limpias y sinceras ellos se comunican te persiguen esperando una frase de amor, abren sus ojos como una ventana al exterior y se llenan de luz, de una luz hermosa que penetra en tu interior que te atrapa en sus redes y te envuelven traspasando tu espíritu y atrapando tu alma.
Muchos se comunican con las miradas, pueden expresar todas las emociones, ellos se hacen entender conocen a las personas que están a su alrededor, con una mirada es suficiente para saber si quieren beber o comer, de esa manera nos comunicamos las madres con nuestros hijos los ojos te persiguen y te hipnotizan, los ojos expresan, trasmiten las emociones, una mirada apagada nos puede revelar si están enfermos dicen que los ojos son un reflejo del alma, los ojos expresan alegría, tristeza, los ojos expresan con mucha intensidad que necesitan sentirse amados, aceptados y sobre todo respetados.
Son hermosos porque tienen el alma pura, están aquí para mostrarnos el camino, ellos te ofrecen el amor incondicional el verdadero amor, para mejorar nuestras vidas, para hacer lo correcto, disfrutar el día a día, nuestro presente para mostrar al mundo entero que podemos ser mejores, porque amar compartiendo y aceptando te hacen crecer como persona te enseña a pisar fuerte para no resbalar porque la vida en si es maravillosa por ella misma.
Mi hermosa hija siempre con su sonrisa en el rostro, porque su estado de ánimo proyecta lo que siente, trasmite felicidad, para una madre es la mayor recompensa, el mayor regalo, el mejor antídoto, debemos sacar partido de cada situación, cambiara las perspectivas nos llevara a ser más positivos y optimistas, ver que cada momento mi pequeña ríe, con esa sonrisa mágica es el mejor regalo, el regalo más maravilloso del mundo.
Todo pasa por alguna razón en esta vida, todo tiene un propósito, nuestros hijos nos hacen ver a través de la luz, una luz que nos irradia, nos arropa y nos permite ver que hacemos lo correcto.
No permitamos perder ni por un solo instante la sonrisa de nuestros pequeños es el homenaje que nos hacen para seguir cada día, es un compromiso con su progreso y bienestar para animarnos a seguir luchando.