Identificación molecular de polimorfismos (SNPs) patogénicos en el gen STXBP1 mediante procedimientos computacionales [Reseña]

Autores: I. Trigo-Pérez y FJ Esteban. Universidad de Jaén

 

Tanto la estructura como la estabilidad de la proteína STXBP1 resultan clave para llevar a cabo su función como mediador en la liberación de neurotransmisores por parte de las vesículas sinápticas. En el artículo “Molecular Modelling and Dynamics Study of nsSNP in STXBP1 Gene in Early Infantile Epileptic Encephalopathy Disease” el investigador Krami Al Mehdi, y sus colaboradores, presentan los resultados obtenidos tras identificar, mediante procedimientos computacionales, polimorfismos genéticos de un solo nucleótido (SNPs) del gen STXBP1 que pueden ser patógenos por su impacto en la estructura y la estabilidad de esta proteína lo cual, sin duda, puede afectar a su función. [Si quieres saber más sobre los polimorfismos y sus consecuencias, evolutivas y en la salud, recomendamos leer el artículo “Diversidad del genoma humano: los polimorfismos” ]

En su trabajo, los investigadores antes citados analizaron 245 SNPs, e identificaron 11 como potencialmente nocivos (S42P, H103D R190W, R235G, D238E, L256P, P335S, C354Y, L365V, R406C y G544D), tras comparar la proteína que genera el gen STXBP1 normal con las producidas por el gen portador de una o varias de estas mutaciones. De hecho, detectaron que estos 11 SNPs se encuentran en regiones de la proteína que participan en su unión a la sintaxina; es decir, son mutaciones que afectan a la función mediadora de STXBP1 y que, por lo tanto, podrían ser la causa de la aparición de este tipo de encefalopatía infantil.

Cabe destacar el hecho de que, de las variantes (SNPs) que han identificado como patogénicas en este trabajo, tres de ellas (R190W, D238E y G544D) han sido detectadas en pacientes con el síndrome STXBP1. Así pues, los autores proponen que se tengan en cuenta estas variantes a la hora de realizar un examen genético en pacientes con encefalopatía epiléptica infantil temprana. Además, también sugieren que es aconsejable realizar análisis funcionales de la proteína STXBP1 con las mutaciones detectadas para conocer los mecanismos biológicos subyacentes a las alteraciones que producen en el síndrome STXBP1.

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